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Los problemas laborales más comunes de la comunidad gay

PROBLEMAS LABORALES GAYS

Los problemas laborales más comunes de la comunidad gay.

La discriminación laboral es mucho más frecuente de lo que nos pensamos. Esto se debe a muchos motivos, y ya nos podemos imaginar cuáles son. Las razones para discriminar a una persona siempre van relacionadas con aspectos de su vida que poco tienen que ver con el trabajo en sí, sino en los prejuicios y en la forma de de pensar de los responsables y superiores en cuestión.

El lugar de trabajo es probablemente el sitio en el que más tiempo pasemos de la semana. Ocho horas al día en la mayoría de lo casos en los que hemos de coincidir con nuestros compañeros, nuestros jefes, otros trabajadores y en muchos casos también con el público, si se trata de un servicio en el que atendemos a personas y ofrecemos un servicio específico. La interacción entre las personas es clave, por eso la discriminación laboral por ser LGBT es más frecuente de lo que pensamos y no por ello debemos quedarnos callados. Lo importante con lo que te has de quedar es que no hace falta esperar a que la situación sea insoportable para que digas basta. Tienes tus derechos y nadie puede pisoteártelos, y aunque hay situaciones muy complejas y diversas, hemos de aprender a navegar con todas ellas para evitar que el odio gane.

 

Homofobia en el lugar de trabajo

Muchas veces pensamos en la idea de homofobia en el trabajo y solo se nos ocurre el típico jefe que llama "maricón" al chico gay, pero la homofobia en el lugar de trabajo va mucho más allá. Empieza desde los comentarios más absurdos y supuestamente "inocentes" hasta el hecho de elegir a una persona u otra para un puesto por la orientación sexual.

La homosexualidad como tal es cada vez menos destacable en los trabajos. Los cuchicheos y el cotilleo siempre estará ahí, pero pasará con todo el mundo y todas las condiciones y características de las personas. Hemos de preocuparnos cuando las bromas son ofensivas, fuera de lugar y en algunos casos incurren casi al acoso. El clásico de toda la vida: ¿por qué siempre se les exige a los homosexuales que cuenten detalles de su vida sexual cuando con las personas hetero nunca se hace?

La transexualidad es también una asignatura pendiente. Cada vez más las empresas contratan a personas trans para todo tipo de trabajos, pero hay algunas que no se atreven a ponerlos de cara al público, como si fueran personas apestadas que no pueden ser vistas en público. En estas ocasiones hay que ser más humano y pensar que si alguien acude a una tienda o a un restaurante y no quiere que le atienda una persona transexual, más vale la pena perder el cliente. Esto lo vemos hoy en día con las empresas que en redes sociales llevan a cabo campañas pro comunidad LGBT y les responden a los homófobos que no les necesitan como clientes. Traslademos eso al día a día, a pie de calle. Las personas transexuales son igual o más válidas que las cisgénero y solo lo demostrarán si se les dan las mismas oportunidades que al resto. 

Mención aparte merece el caso de las personas con VIH. Obviamente, no es obligatorio contar tu condición en tu sitio de trabajo ya que eso no afecta al día a día de tu puesto, por lo que si alguien se entera y pretenden acosarte por ello o exigirte que te hagas pruebas y les remitas las analíticas, probablemente no tengan razón. Es muy triste que muchas empresas sigan hoy en día poniendo piedras en el camino de la tolerancia y el respeto a las personas seropositivas y con VIH. Son los pequeños gestos los que marcan la diferencia y pueden hacer cambiar las cosas, por eso las empresas tienen una responsabilidad extra al mostrar total normalidad ante una situación como esta, que es mucho más común de lo que creemos.  

Consejos para afrontar la homofobia en el lugar de trabajo

Si te despiden o te acosan en el trabajo por tu orientación o identidad sexual, sigue los siguientes consejos:

  • Acude a los sindicatos: de hecho, este tipo de recomendación vale para todos los trabajos. Es imprescindible que sepas a dónde acudir si tienes un problema de acoso u homofobia que sube más allá de tus responsables. Si en una empresa grande cuentas con departamento de recursos humanos, es muy fácil acudir, pero si es una empresa pequeña, tienes que protegerte.
  • Educa a tus compañeros: la homofobia no siempre nace del odio, muchas veces lo hace desde el desconocimiento, por eso es importante tener sangre fría, y antes que ofendernos y cerrarnos en banda, educar a las personas, haciéndoles entender que hay ciertos comentarios que ofenden y que simplemente no deben hacerse. Y si no lo entienden, entonces sí que tienen un problema muy serio, pero tú habrás cumplido con tu parte.

Está claro que todo queremos encontrar un trabajo estable en el que estar a gusto, ganar dinero y seguir con nuestra vida. Por eso, es importante imponernos, dejar claros cuáles son nuestros derechos, y no dejarnos pisotear ni ser motivo de burla solo por ser abiertamente homosexuales, bisexuales, transexuales o intersexuales. No dejes que ningún jefe te menosprecie, se burle de ti o te haga sentir menos de lo que eres por tu orientación sexual ni por cualquier otra característica que te haga único.

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