Una bandera LGBT gigante vuela sobre Moscú como protesta de la política de Putin
Alexander Donskoy, un artista gay ruso y ex alcalde de la ciudad de Arkhangelsk, apareció en los titulares de esta semana ondeando una bandera arco iris gigante hacia el Kremlin de Moscú como acto de protesta.
La bandera, que fue izada por docenas de globos de color del arco iris en la Plaza Manezhnaya, envió un claro mensaje al gobierno ruso, que desde 2013 sigue aplicando la llamada ley de "propaganda gay" que prohíbe la "promoción" de cualquier cosa fuera de lo que consideran valores familiares tradicionales a los menores.
La ley ha sido usada para multar y en algunos casos encarcelar a personas LGBTQ+ por simplemente expresar lo que son.
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Donskoy, que fue alcalde de 2005 a 2008, no es ajeno a la controversia. Mientras estuvo en el cargo, se convirtió en el primer político ruso de reconocimiento nacional en anunciar una candidatura a la presidencia en la carrera de 2008. Por esa época, en 2007, fue detenido por acusaciones de delitos económicos y abuso de poder. Finalmente fue condenado a tres años de libertad condicional, pero hay muchos que afirman que su detención fue por motivos políticos en relación al colecivo LGBT.
Durante su ausencia en la política, Donskoy se ha hecho conocido como artista y galerista. Salió del armario como gay en octubre de 2017 y desde entonces ha usado su voz para arrojar luz sobre la agenda anti-LGBTQ+ de Putin.
En una entrevista, el ex alcalde explicó que al ondear la bandera del arco iris cerca del Kremlin está enviando un mensaje a Putin, quien en las últimas semanas criticó a las embajadas extranjeras por colgar banderas del Orgullo en sus edificios.
Además, quería reconocer que su galería, que está en Moscú, fue destruida por asaltantes desconocidos.
A principios de este año, Donskoy reveló imágenes de su proyecto "Putin es Rusia" en Estambul antes de que la policía le obligara a retirarlo. El proyecto, que mostraba a Putin como un "superhéroe", pretendía mostrar los buenos lazos entre las ciudades de Ankara y Moscú a pesar de las diferencias políticas.
"Quería llamar la atención sobre cómo se toma a Putin en Rusia: como un superhéroe. Así que escribí en los retratos 'Putin es un superhéroe'", dijo Donskoy.
En ese momento, Donskoy dijo que quería que su trabajo provocara emociones en la gente y viera sus reacciones.
"Habrá más muestras de arte en los países de la democracia occidental. Así que mostraré que el pueblo ruso considera las sanciones contra Putin como sanciones contra ellos mismos", dijo. "Por lo tanto, soy un embajador de la paz".
