Un sicario gay es asesinado por su propia familia
Los sospechosos del asesinato de un miembro gay de la 'Ndrangheta se sentarán en el banquillo de los acusados en uno de los mayores juicios de la mafia en la historia de Italia.
El juicio se centrará específicamente en la familia Mancuso, una de las más poderosas de la red criminal 'Ndrangheta. El sindicato es el más rico y poderoso de Italia, controla la mayor parte de la cocaína de Europa y tiene su sede en Calabria.
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En 2019, 355 miembros de la 'Ndrangheta y colaboradores fueron detenidos e imputados en una operación en la que participaron 2.500 policías militares.
Se trata de la mayor represión de la mafia desde 1984, cuando más de 450 miembros de la Cosa Nostra, o mafia siciliana, fueron juzgados.
El juicio comenzó en enero y, a principios de este mes, finalizó el testimonio de unos increíbles 58 informantes de la mafia.
Los cientos de acusados se dirigirán ahora al banquillo de los acusados como parte del "maxi-juicio", apareciendo en pantallas en un enorme búnker de emergencia readaptado.
El juicio durará al menos un año más, según AFP, con 900 testigos y 400 abogados implicados. En una de las audiencias, se tardó tres horas en limitarse a leer los nombres de los acusados.
Se acusa a los acusados de una amplia gama de delitos, como intimidación, compra de votos, tráfico de drogas, extorsión, soborno a jueces, falsificación de certificados médicos, almacenamiento de armas y fraude empresarial, por nombrar sólo algunos.
También se juzgarán cinco casos de asesinato, uno de los cuales es el del miembro de la mafia gay Filippo Gangitano en 2002.
El poderoso miembro convertido en informante Andrea Mantella es uno de los que han declarado ante el tribunal, y que ha dicho que es responsable de organizar la muerte de Gangitano, su primo.
Cuando Gangitano, que había cometido múltiples asesinatos, empezó a vivir con una pareja masculina, Mantella dijo que la 'Ndrangheta "no podía tolerar" la "desgracia" de que un miembro fuera abiertamente gay.
Mantella sostiene que intentó convencer a los jefes de la Mafia para que expulsaran a Gangitano en lugar de matarlo, pero su petición fue rechazada, y como su primo Mantella tuvo que ser quien organizara el asesinato.
Invitó a Gangitano a una granja, confesó, antes de hacer que le dispararan. Su cuerpo fue colocado en un saco de pienso y enterrado, antes de ser cubierto posteriormente con asfalto.
