El padre de Britney Spears pide que se haga público su historial médico
La batalla legal de Britney Spears contra su padre, Jamie Spears, ha dado un nuevo y amargo giro al intentar éste hacer público su historial médico privado.
Después de que Britney ganara su batalla no sólo para retirar a su padre de su posición de poder dentro de su tutela, sino para desechar el acuerdo legal por completo, Jamie Spears está ahora luchando para que sus registros médicos sean desvelados por el tribunal.
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El abogado de Jamie pidió a la jueza del Tribunal Superior de Los Ángeles, Brenda Penny, que presentara una moción para desvelar los registros de salud de Britney el próximo mes y alegó que el "público tiene derecho a saber" más contexto el miércoles (19 de enero), según People.
El abogado Alex M Weingarten afirmó que Britney y su abogado, Mathew Rosengart, estaban utilizando los medios de comunicación para despertar la simpatía del público y exigió que el tribunal desprecintara todos los expedientes de todo el caso para que se revelara la "verdad".
Sin embargo, Rosengart respondió inmediatamente calificando la petición de "ofensiva" y "muy inapropiada".
"No creemos que un padre que quiera a su hija presente una demanda para desclasificar su historial médico", dijo.
Weingarten pidió entonces a la jueza Penny que fijara una fecha para desprecintar los citados documentos, pero no accedió a su petición.
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En la acalorada vista judicial también se vio a Rosengart afirmar que su equipo tiene "pruebas contundentes" de la mala gestión financiera y la vigilancia violenta por parte de Jamie durante el tiempo que estuvo como curador de Britney.
Su presentación incluyó una declaración de Sherine Ebadi, una investigadora de Kroll y ex agente del FBI que fue contratada por el equipo legal de Britney para investigar la gestión de Jamie del patrimonio.
Ebadi ha corroborado las afirmaciones hechas por el ex empleado de Black Box Security Alex Vlasov en el documental de The New York Times Controlling Britney Spears, según las cuales Jamie hizo que la empresa vigilara el teléfono de Britney, incluidas las comunicaciones privadas con su entonces abogado Sam Ingham, su ahora prometido Sam Asghari y sus hijos.
La cantante de "Piece Of Me" comparte sus hijos Sean Preston, de 16 años, y Jayden James, de 15, con su ex marido Kevin Federline.
En los archivos, Rosengart alegó que Jamie y sus abogados se llevaron más de 36 millones de dólares (26,4 millones de libras) de la herencia de la estrella del pop, incluyendo 6 millones de dólares (4,4 millones de libras) en honorarios a Black Box.
Variety informó que el abogado de Jamie, Weingarten, acusó a Rosengart de fabricar estas acusaciones y plantarlas en la prensa, lo que llevó al abogado de Britney a llamar mentiroso al abogado de Jamie.
Rosengart también afirmó que Jamie intentó lanzar su propio programa de cocina a varias cadenas en 2015 aprovechando la fama de su hija.
Weingarten siguió solicitando que se reserve una parte del dinero para poder liquidar eventualmente los honorarios de los abogados, pero la jueza Penny dictaminó que no era necesario apartar una reserva del patrimonio de Britney.
La próxima audiencia se ha fijado para el 27 de julio.
Desde que Britney rompió su silencio sobre la tutela que controló su vida durante casi 14 años, ha arremetido contra su familia por el papel que jugaron en su miseria.
De hecho, la cantante se ha visto envuelta recientemente en una guerra de palabras con su hermana menor, Jamie Lynn Spears, por sus recién publicadas memorias, lo que ha llevado a Britney a emitir una carta de cese y desistimiento.
