Los pacientes de viruela del mono hablan de su angustia psicológica

La viruela del mono puede dejar algo más que cicatrices físicas, según varios relatos de pacientes.

El especialista en enfermedades infecciosas del Hospital Bichat-Claude Bernard, Nathan Peiffer-Smadja, declaró a France24 que las investigaciones sugieren que "el malestar psicológico está relacionado con varios aspectos" de la enfermedad.

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Según él, la angustia está relacionada con las secuelas "estéticas" de las dolorosas lesiones que aparecen en diversas partes del cuerpo durante la infección por viruela del mono, mientras que el esfuerzo físico al que se somete el cuerpo durante los periodos de infección también puede tener un efecto duradero en la salud mental.

Corentin Hennebert, uno de los primeros casos conocidos en Francia, habló sobre sus experiencias con la enfermedad a la agencia de noticias francesa Agence France-Presse (AFP), diciendo: "Todo lo que podía pensar era el dolor.

"Y no soy el único, otros se han puesto en contacto conmigo para decirme que estaban al límite, que no paraban de llorar".

Hennebert fue uno de los raros pacientes que experimentó la formación de lesiones en el interior del ano, lo que, según Peiffer-Smadja, puede ser "extremadamente doloroso".

"Tenía constantemente la impresión de que me estaban clavando cuchillas de afeitar; no puedo pensar en ninguna otra comparación, [el dolor] era tan fuerte", continuó Hennebert.

Al parecer, el joven de 27 años perdió 5 kilos en sólo tres días porque no comía debido a la gran cantidad de dolor que sufría.

Tras recuperarse de la viruela del mono, Hennbert se convirtió en portavoz de un grupo de acción afirmativa para antiguos pacientes de viruela del mono que exigen que se haga más por la enfermedad.

El estigma que rodea la presencia física de los síntomas también conlleva sus propias dificultades, según el trabajador del centro de salud sexual, Michel Ohayon, que comparó las lesiones con las del cáncer de sarcoma de Kaposi, un "síntoma de sida" visible.

"En cuanto la enfermedad es visible, da miedo porque se convierte en algo potencialmente estigmatizante", dijo.

El estigma que rodea a la viruela del mono se ha convertido en un importante catalizador de su propagación, ya que expertos como la republicana Marjorie Taylor Greene impulsaron la idea de que se trata de una "enfermedad gay" que hay que "ignorar".

Organismos como la Organización Mundial de la Salud han contraatacado repetidamente a estas afirmaciones, instando a la gente a no "reforzar los estereotipos homófobos y racistas que exacerban el estigma" y crean un ambiente de despreocupación.

"Tenemos un brote que ya se ha extendido por todo el mundo rápidamente a través de nuevos modos de transmisión, sobre los que entendemos muy poco", dijo el director general de la OMS, el Dr. Tedros Adhanom Ghebreysus, en una declaración de julio. "Sé que este no ha sido un proceso fácil ni sencillo, y que hay opiniones divergentes".

Esto ha sido especialmente cierto para el activista LGBTQ+ Sébastien Tuller, cuando empezó a ver lesiones en su cara, lo que le provocó "mucha ansiedad".

"Hay mucha homofobia residual y esto tiene un impacto real en la salud mental", dijo. "Muchos no dicen que tienen -o han tenido- viruela del mono, por miedo a ser estigmatizados".