Los países donde el colectivo LGBTI sufre más represión y ausencia de derechos fundamentales
Un panorama alarmante se perfila hoy en día en diversos rincones del mundo, donde las personas LGBTI enfrentan entornos legales y sociales de extrema hostilidad. Según diversos informes y estudios, varios países se encuentran entre los más represivos a nivel global.
África subsahariana: leyes duras y crecientes agresiones
En numerosos países africanos, los países donde menos derechos tienen las personas LGBTI destacan por imponer castigos severos. En Nigeria, por ejemplo, las relaciones entre personas del mismo sexo están penadas con hasta 14 años de prisión; en las regiones que aplican la ley islámica (sharía), incluso se contempla la pena de muerte para ciertos casos.
En Uganda, el panorama es aún más sombrío: tras la aprobación de la Ley contra la Homosexualidad en 2023, las penas incluyen prisión de por vida por relaciones homosexuales y la pena de muerte por “homosexualidad agravada”
Eritrea, por su parte, impone penas de hasta tres años de prisión por actos homosexuales, sin reconocimiento alguno de derechos como expresarse libremente, adoptar o protegerse de la discriminación.
Asia Central y Medio Oriente: criminalización y ausencia de libertades
En Uzbekistán, mantiene la criminalización de relaciones entre hombres, castigadas con hasta tres años de cárcel. Las mujeres no están incluidas en la ley, pero las personas LGBTQ sufren represalias sociales, violencia y chantaje sin protección legal.
En otros países como Omán, Brunei o Arabia Saudí, su legislación penaliza la expresión de identidad de género o actitudes consideradas no conformes, incluyendo condenas severas e incluso la pena de muerte en algunos casos.
Europa oriental y Eurasia: retrocesos legales bajo autoritarismos
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En Europa, algunos países del este han retrocedido en derechos. Según el mapa “Rainbow Map 2025” de ILGA‑Europe, Rusia, Azerbaiyán y Turquía se encuentran entre los países europeos más restrictivos en términos de derechos LGBTI.
Rusia ha declarado “extremista” el movimiento LGBTI a nivel internacional, criminalizando el apoyo a sus causas y ampliando la censura contra cualquier visibilidad o expresión queer.
En Rumanía, el colectivo también vive un contexto adverso: aunque ha despenalizado hace décadas, sigue siendo el país con menos garantías legales dentro de la Unión Europea, con crecientes incidentes de odio tras las últimas elecciones.
Leyes globales en retroceso y persecución
Un reciente informe de ONUSIDA alerta que, por primera vez en una década, varios países han adoptado o reinstaurado leyes punitivas específicas contra el colectivo LGBTI. Entre ellos se encuentran Mali, Uganda, Ghana y otros, lo que retrasa la lucha contra el VIH/SIDA y amenaza metas globales de salud pública.
En Burkina Faso, el parlamento aprobó el 2 de septiembre de 2025 una ley que prohíbe la homosexualidad, con penas de dos a cinco años de prisión y multas monetarias.
Este panorama refuerza la urgencia de apoyar los derechos LGBTI globalmente, fomentar la visibilidad, y fortalecer la solidaridad internacional.
