¿Hacer fotos diferentes? Prueba las cámaras LOMO

Las cámaras LOMO no son nada nuevo, son un producto de una compañía rusa que se fundó en 1914. El acrónimo de LOMO es ni más ni menos que Leningradskoye Optiko-Mechanichesckoye Obyedinenie (casi nada...) y conocieron la popularidad mundial cuando dos estudiantes vieneses que estaban de vacaciones en Checoslovaquia compraron una de estas cámaras en un mercadillo. Vamos, los típicos artistas experimentales adictos a los mercadillos tipo "El Rastro".



Al revelar las fotos que habían hecho al tun-tún por las calles de Praga descubrieron unas fantásticas instantáneas llenas de luz y emoción. O lo que es lo mismo, unas fotos raras que quedarían fenomenal en cualquier revista de tendencias en la que aparece gente con cabezas de caballo en la cabeza.



Con la cámara LOMO puedes hacer dobles exposiciones, tienes flashes de colores, un montón de lentes diferentes... Todo un micro-universo de accesorios para conseguir la foto más rara ever. Por unos 100 euros te puedes hacer con una cámara y un par de carretes. Y luego, la parte coñazo: el revelado, que te saldrá por unos 6 euritos. Ahorra también para un scanner porque, ¿para qué vas a hacer fotos que no puedes enseñar luego por Facebook?



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