Los futbolistas alemanes protestan contra la censura hacia el apoyo LGTB+
La selección alemana de fútbol posó con una equipación con las rayas del arco iris y las manos sobre la boca en protesta por la sanción de los brazaletes OneLove pro-LGBTQ+ durante el Mundial de Qatar.
Los jugadores se manifestaron en una foto de equipo antes de su partido contra Japón, después de que los equipos fueran amenazados con tarjetas amarillas si llevaban el brazalete arco iris.
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Los equipos de toda Europa, entre ellos Inglaterra, Gales, Bélgica, Dinamarca, Alemania, Países Bajos y Suiza, tenían previsto llevar la banda con los colores del arco iris para apoyar los derechos del colectivo LGBTQ+ en Qatar, donde es ilegal ser gay.
La selección alemana escribió en un comunicado en Twitter: "Hemos querido utilizar el brazalete de capitán para defender los valores que tenemos en la selección alemana: la diversidad y el respeto mutuo.
"Junto con otras naciones, queríamos que se escuchara nuestra voz.
"Negarnos el brazalete es lo mismo que negarnos la voz. Mantenemos nuestra posición".
El equipo añadió que la protesta "no se trataba de hacer una declaración política", ya que "los derechos humanos no son negociables".
Sin embargo, la protesta no fue celebrada por todo el mundo, ya que un destacado periodista qatarí sugirió que su derrota ante Japón estaba relacionada, diciendo: "Esto es lo que pasa cuando no te centras en el fútbol".
No se trataba de hacer una declaración política: los derechos humanos no son negociables. Eso debería darse por sentado, pero todavía no es así. Por eso este mensaje es tan importante para nosotros.
Negarnos el brazalete es lo mismo que negarnos la voz. Mantenemos nuestra posición. pic.twitter.com/tiQKuE4XV7
- Alemania (@DFB_Team_EN) 23 de noviembre de 2022
La Federación Alemana de Fútbol (DFB) afirmó anteriormente que la FIFA "chantajeó" a las selecciones de fútbol participantes para que abandonaran los brazaletes OneLove durante la Copa del Mundo.
Steffen Simon, director de medios de comunicación de la DFB, declaró a la radio Deutschlandfunk tras el partido de Inglaterra contra Irán el lunes (21 de noviembre): "El director del torneo se dirigió a la selección inglesa y le habló de múltiples violaciones de las reglas y le amenazó con imponer sanciones deportivas masivas, sin especificar cuáles serían éstas".
Simon añadió que las otras asociaciones de fútbol que se comprometieron a llevar el brazalete OneLove decidieron mostrar su "solidaridad" con la selección inglesa, pero dijo que la decisión era "dolorosa".
"Hemos perdido el brazalete y es muy doloroso, pero somos las mismas personas que antes con los mismos valores", dijo.
"No somos impostores que dicen tener valores y luego los traicionan. Estábamos en una situación extrema, en un chantaje extremo y pensamos que teníamos que tomar esa decisión sin quererlo."
La DFB ha declarado que tiene previsto emprender acciones legales contra la FIFA por la prohibición del brazalete LGBTQ+.
