La tragedia en el festival de música israelí de “paz” que acabo de masacre
Nick Zhiharev fue uno de los miles de israelíes que asistieron durante la noche a un festival de música cerca de la frontera de Israel con Gaza. El evento se anunciaba como una celebración de "amigos, amor y paz".
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Terminó en una masacre.
Justo después del amanecer del sábado, Zhiharev vio lo que inicialmente pensó que eran fuegos artificiales que surcaban el cielo.
"Pero entonces le dije a mi amigo: 'Creo que nos están bombardeando', y nada más decirlo, la música se cortó", relató.
Zhiharev y otros se encogieron de hombros. Los israelíes están acostumbrados a ver cohetes lanzados desde Gaza, la gran mayoría de los cuales son derribados por el sistema de defensa antiaérea israelí Cúpula de Hierro.
Zhiharev, que pasó varios años en Toronto cuando era adolescente, dijo que no estaba demasiado preocupado. Hasta que oyó los disparos.
"Se oían (las balas) rebotar en los coches. Era como una escena de Call of Duty. Había disparos por todas partes", dijo Zhiharev.
"Me sentí como una presa huyendo de un depredador".
El festival de música trance Tribe of Nova, cerca del kibutz Reim, fue uno de los primeros objetivos de los militantes de Hamás cuando lanzaron su ataque contra Israel el 7 de octubre de 2023.
Hombres armados de Gaza aparecieron sin previo aviso y empezaron a disparar indiscriminadamente contra la multitud.
El festival de música fue uno de los primeros objetivos de los militantes de Hamás cuando lanzaron su ataque coordinado y sin precedentes contra Israel, haciendo que los asistentes a la fiesta, presas del pánico, corrieran en todas direcciones.
Muchos no lograron salir. Algunos intentaron escapar en sus coches, pero quedaron atrapados entre otros vehículos y fueron abatidos en sus asientos. Los equipos de rescate voluntarios han recuperado hasta ahora más de 260 cadáveres.
Otros fueron secuestrados y ahora son rehenes de Hamás.
Sentado a la mesa de la cocina del apartamento de su familia en Rishon le Zion, Zhiharev hojeaba a la izquierda en su teléfono fotografías de rostros jóvenes sonrientes, los asistentes al festival que ahora han desaparecido, entre ellos varios de sus amigos.
"Lo más probable es que estén muertos o secuestrados", dice apenas por encima de un susurro.
Sentado en la mesa de la cocina del apartamento de su familia en Rishon le Zion, Nick Zhiharev muestra al corresponsal de Global News Jeff Semple fotografías de los asistentes al festival que ahora están desaparecidos, entre ellos varios de sus amigos.
El ex jugador de fútbol americano universitario de 28 años consiguió escapar a pie. Corrió durante un par de horas antes de refugiarse finalmente en un granero.
Pasaron varias horas antes de que viera a alguien del ejército israelí.
"Se suponía que éramos un ejército fuerte", dijo. "¿Dónde estábamos?".
El ejército israelí, cogido aparentemente desprevenido, ha contraatacado con fuerza, movilizando a miles de reservistas y declarando formalmente el estado de guerra.
Sus objetivos en Gaza han incluido una mezquita y un edificio de apartamentos. Israel culpó a Hamás de utilizar a civiles como escudos.
Fuego y humo se elevan tras un ataque aéreo israelí, en la ciudad de Gaza, el domingo 8 de octubre de 2023. Algunos canadienses dicen que están atrapados en Israel en medio de combates mortales, ya que las compañías aéreas cancelan sus vuelos de salida y llegar a la Embajada de Canadá en un fin de semana festivo resulta difícil.
La palestina Sabreen Abu Daqqa estuvo atrapada bajo los escombros en Gaza durante horas, después de que un cohete israelí impactara en su casa. Cuando por fin la rescataron, se enteró de que tres de sus hijos habían muerto y otro estaba desaparecido.
"Estaba en casa y, de repente, oímos un ruido y todo cayó sobre nuestras cabezas, mis hijos estaban a mi lado", dijo, con lágrimas corriendo por sus mejillas.
Las bajas aumentan en ambos bandos hasta cotas horribles no vistas en décadas. Hasta el domingo, al menos 700 israelíes habían muerto. Los ataques aéreos israelíes han matado a más de 400 personas, entre ellas 20 niños.
"No tiene precedentes. No parece real", dijo la israelí-canadiense Jess Burke. Vive en Toronto y llegó a Israel la semana pasada para casarse. Su luna de miel duró poco.
La israelí-canadiense Jess Burke vive en Toronto y llegó a Israel para casarse. Su luna de miel se vio interrumpida por el atentado de Hamás.
"Me desperté a las 7 de la mañana con mi padre aporreando la puerta para avisarnos de que habían sonado las sirenas antiaéreas."
Ella y su extensa familia se refugiaron durante horas el sábado en una pequeña habitación de hormigón, mientras afuera retumbaban las explosiones y los disparos.
"Soy una superviviente del Holocausto de tercera generación. Y hoy tenemos informes de que esta es la mayor cantidad de judíos que han sido asesinados en un solo día desde el Holocausto", dijo a los medios de comunicación
"Parece industrializado. Es una masacre".
