Neonazis llaman "pedófilos" a los protagonistas de un cuenta-cuentos de Drag Queen
El líder de un grupo neonazi fue detenido junto con otras dos personas tras irrumpir en una hora de cuentos de Drag Queen, llamando "pedófilos" a las personas queer.
El sábado (23 de julio), el acto de la Hora del Cuento tuvo lugar en la Casa Loring Greenough. Una veintena de hombres del Club Nacional Socialista acudieron al acto con la cara cubierta de negro con el número 131 y con una pancarta en la que se leía: "Escoria pedófila fuera de nuestras calles".
La Liga Antidifamación identificó al NSC-131 como un grupo de supremacía blanca con una "red clandestina de hombres blancos que están dispuestos a luchar contra sus enemigos percibidos a través de acciones directas localizadas" y el grupo "participa en planes para trollear o acosar de otro modo a quienes se oponen a ellos".
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Fieles al espíritu del grupo, los manifestantes lanzaron insultos anti-LGBTQ+ a los niños que salían del edificio y a los manifestantes que venían a mostrar su apoyo, en medio de una fuerte presencia policial, según WGBH.
Richie Cadet, que estaba presente en el evento, describió la escena a LGBTQNation: "Resultó que estaban llamando pedófilos a personas de la comunidad LGBTQ". Cadet añadió: "Definitivamente estaban diciendo ciertas palabras que nunca deberían decirse sobre nadie".
Pronto se produjo una pelea entre el supuesto fundador de NSC-131, Chris Hood, y el manifestante contrario, Seth Rosenau, según LGBTQ+ Nation. Otro manifestante fue detenido por destrozar un coche.
La policía disolvió la pelea y ambos hombres fueron detenidos por alteración del orden público. Hood fue acusado de pelearse en público el lunes (25 de julio) y deberá ser juzgado en septiembre, pero los cargos contra Rosenau y el otro manifestante fueron retirados.
La Casa Loring Greenough condenó a Hood y a su grupo por sus acciones "maliciosas" y criticó su postura anti-LGBTQ+.
"Desgraciadamente, un grupo de neonazis enmascarados se reunió justo delante de nuestra valla para corear una retórica maliciosa y homófoba", añadieron. "La protesta de un evento de la Hora del Cuento de Drag Queen fue una herramienta para ganar atención. Cualquier preocupación por el bienestar de los niños estuvo ausente".
La alcaldesa de Boston, Michelle Wu, también intervino, diciendo en un comunicado que Boston ha sido un objetivo de las protestas contra el colectivo LGBTQ+, y que la ciudad no se dejará intimidar por los fascistas y se enfrentará a aquellos que no apoyen la igualdad para todos.
"No es casualidad que estos grupos cobardes de fuera de nuestra ciudad sigan apuntando a Boston, ya que mostramos cómo el liderazgo representativo, las comunidades empoderadas y las políticas audaces pueden tener un impacto inmediato.
"Estamos preparados y no nos dejaremos intimidar en nuestro trabajo para hacer de Boston una ciudad para todos. Seguimos preparados para el despliegue en toda la ciudad de recursos adicionales de seguridad pública con un enfoque de tolerancia cero hacia cualquier grupo que busque intimidar o acosar a los residentes en nuestra ciudad."
El fiscal del distrito de Suffolk, Kevin Hayden, denunció en un comunicado la "presencia de supremacistas blancos" y dijo que "la presencia de supremacistas blancos en una lectura de libros en Jamaica Plain hoy, al igual que su marcha en el centro de Boston a principios de este mes, es a la vez una vergüenza y una advertencia."
"La sociedad de todo el mundo es el objetivo de estos grupos, y la sociedad de todo el mundo debe rechazarlos", concluyó Hayden.
Los eventos de lectura LGBTQ+ han sido una fuente de controversia en los últimos meses, ya que siguen siendo el objetivo de grupos de odio como el NSC-131.
Esta semana, el lunes (25 de julio), una turba de derechas acosó a la drag queen Aida H Dee con cánticos de "pedofilia" en un evento de cuentos infantiles en el Reino Unido.
El escarnio de estos eventos sigue creciendo mientras las personas queer siguen luchando por la inclusión y la diversidad.
Las autoridades también están dando pasos para proteger a las personas LGBTQ+, ya que la fiscal de EE.UU. de Massachusetts, Rachael Rollins, anunció que va a poner en marcha una nueva línea telefónica a la que se puede llamar para denunciar actividades de supremacistas blancos, según The Independent.
Dijo: "En las próximas semanas anunciaré un número de teléfono específico para que la comunidad llame. Tenemos que desenmascarar a estos cobardes".
